domingo, 3 de noviembre de 2013

Responsabilidad  empresarial y medio social


Las empresas como fuerza emprendedora y generadora de riqueza, hallaron  en la modernidad su marco jurídico, político y con una clara función en la sociedad. Múltiples demandas que en otra época eran dirigidas hacia distintos estamentos abocados a la gestión pública, comenzaron a ver en las empresas, instituciones idóneas para dar respuesta a demandas relacionadas con el bienestar y la sustentabilidad.
Si tenemos presente la definición dada de la RSE por el Foro de Expertos en RSE del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, podemos concluir que ya no es suficiente con obtener beneficios económicos a corto o medio plazo, sino que las organizaciones también deben mostrar un comportamiento responsable y comprometido con los Derechos Humanos, las Normas Laborales, el Medio Ambiente y la Lucha Contra la Corrupción. Su responsabilidad ya no se limita a las consecuencias de lo que hacen, sino que también se valora cómo se sitúan y actúan con sus Grupos de Interés.
Aunque la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es inherente a la empresa,
recientemente se ha convertido en una nueva forma de gestión y de hacer negocios, en la cual la empresa se ocupa de que sus operaciones sean sustentables en lo económico, lo social y lo ambiental, reconociendo los intereses de los distintos grupos con los que se relaciona, buscando la preservación del medio ambiente y la sustentabilidad de las generaciones futuras. Es una visión de negocios que integra el respeto por las personas, los valores éticos, la comunidad y el medioambiente con la gestión misma de la empresa, independientemente de los productos o servicios que ésta ofrece, del sector al que pertenece, de su tamaño o nacionalidad.
La aspiración de una empresa por la responsabilidad social se fundamenta en el
reconocimiento de la mutua interdependencia de todos los actores sociales, económicos y ambientales afectados positiva o negativamente por la actividad de la organización, y por lo tanto en el reconocimiento de que todos ellos cuentan con intereses legítimos sobre estas actividades.
Mientras que el desarrollo económico y social continúa mejorando las vidas de algunos, todavía hay trabajo considerable que hacer para alcanzar condiciones favorables en los ámbitos económico, social y ambiental que beneficien a toda la sociedad. La potencia y la influencia de las empresas continúan creciendo y es cada vez más evidente que la construcción de una sociedad más justa y una economía más sostenible depende, en gran parte, de influenciar a la comunidad de negocios para poner en ejecución acciones que permitan alcanzar estas metas.
Los mismos indicadores, cuantitativos y cualitativos, servirán de base para que la empresa y sus directivos establezcan las medidas necesarias para hacer más efectiva y eficiente la manera en que la responsabilidad social se integra a sus estrategias medulares.
La Responsabilidad Social Empresarial es hoy un valor agregado y una ventaja
competitiva para la empresa. “Es, al mismo tiempo, un imperativo para los negocios y una ventaja competitiva”.

LAS EMPRESAS FAMILIARES

Como su misma definición lo establece, la empresa familiar significa la unión de dos
espacios de socialización distintos: la empresa y la familia.
Las empresas familiares son creadas debido al comportamiento emprendedor de uno o más fundadores, que encuentran y explotan una oportunidad. Es necesario que esta Orientación Emprendedora se transmita a las siguientes generaciones, siendo un elemento importante para la supervivencia y el crecimiento de las empresas familiares. Sin embargo, las características específicas de las empresas familiares pueden tanto estimular como impedir el comportamiento emprendedor. Por otra parte, las empresas familiares son, por su propia naturaleza, complicadas por la dinámica de la familia propietaria. Esta dinámica no sólo afecta al rendimiento del negocio, sino también al crecimiento del negocio, el cambio y la transición en el tiempo.
El reto de este tipo de organizaciones es manejar las relaciones de trabajo y
parentesco, es decir las relaciones interpersonales, o en otras palabras, compaginar una
relación cercana (familiar) con una relación de trabajo eficiente.
La evolución y continuidad de la empresa es uno de los grandes problemas abordados en el discurso sobre la empresa familiar. El aspecto familiar,  es un factor importante para la viabilidad, continuidad, evolución y crecimiento de la empresa. Por lo tanto, si la
empresa perdura en el tiempo, también lo habrá de hacer la familia, al menos durante
cierto lapso (en ocasiones una empresa familiar logra desarrollarse y subsistir por un
espacio largo de tiempo, pero la familia que la fundó ya no participa total o en parte de la
propiedad de la misma).
La sucesión en una empresa familiar es un tema clave y central cuando se aborda la problemática en el discurso de la empresa familiar. La sucesión implica el paso de la propiedad y/o dirección de la empresa de la primera a la segunda generación de la empresa. Este cambio es un momento crítico para cualquier empresa familiar La elección del sucesor o sucesores  involucra una valoración muy permeada por lo sentimental y afectivo, por lo cual esta decisión tiene repercusiones muy profundas.
El rol del psicólogo como consultor de una empresa familiar,  será por demás delicado , porque él deberá  siempre manejarse, por un lado ante  las mismas presiones competitivas a la que se encuentran sometidas todas las empresas como el resto de las demás organizaciones, pero por otro lado tendrá que poner sobre la mesa, , un tema sumamente complejo, que es  la familia con todas sus implicancias emocionales y subjetivas que esto implica y que si bien le otorga identidad específica a la empresa familiar, en ocasiones puede esto mismo atentar contra su viabilidad .
Algunos integrantes de este grupo que hemos transitado por la experiencia de pertenecer a una empresa familiar creemos que la segunda generación de una empresa con estas características debe ante todo ser consciente y así poder valorar el camino allanado que le brindan, al entrar a una empresa en total funcionamiento, pero a la vez uno debe apropiarse, cada uno con su estilo personal, de aquello que fue creado por otro ( progenitor), siendo  fundamental capacitarse en ese rol que se le adjudica., y asumiendo  con total madurez y convicción esa responsabilidad, que le fue dada.